¿Es bueno comer chicle para quitar el hambre?

Hace un tiempo, escribí un post donde les daba una serie de trucos para calmar la ansiedad por comer. Entre ellos, les decía que era un adicto a los chicles sin azúcar (orbit de eucalipto) y que me venían bien para quitarme las ganas de comer por su sabor fuerte. Pues bien, a veces estos chicles/caramelos sin azúcar no son tan óptimos para quitar el hambre. Me lo dijo un endocrino hace tiempo, y voy a explicarles por qué.

La saliva

Cuando comemos chicle, podemos notar que aumenta la cantidad de saliva en nuestra boca. Esta saliva, como es lógico, la tragamos y es justo ésto los que nos puede aumentar las ganas de comer.

Cuando salivamos, el estómago dice “Eh!, la boca está salivando, así que probablemente es porque dentro de poco viene comida”. Es decir, cuando comemos chicle, engañamos al estómago haciéndole creer que vamos a comer, cuando normalmente no es así.

El estómago, al ver que no entra lo que esperaba, se “queja” activando el hambre. Ésto también pasa en menor medida con los caramelos, lo que pasa es que un caramelo puede durarnos en la boca 10 o 15 minutos, mientras que un chicle podemos tenerlo 1 o 2 horas fácilmente.

Por supuesto, todo ésto es una explicación ruda a un fenómeno más complejo, pero intento resumirlo lo mejor posible, además de que no sé si sabría explicarlo mejor

Entonces, ¿debo dejar de comer chicle?

Este endocrino me dijo que comer chicle podría aumentarte las ganas de comer, pero que no a todo el mundo le pasa. Lo mejor, es que estés atenta a la sensación que te produce y actuar conforme las circunstancias.

En mi caso, no hay día que no coma un par de ellos o tres. No me despierta el hambre, por lo que sigo comiéndolos. Pero sí que es verdad que, cuando los tengo demasiado tiempo en la boca, empiezo a notar una cosilla por el estómago, pero eso pasa cuando ya el chicle está sin sabor, así que lo tiro y vuelvo a mi estado “normal” en unos pocos minutos.

Por todo esto, os aconsejo que estes atentas a cómo os sientan los chicles y caramelos sin azúcar. Ya sabéis que, cuando llevamos mucho tiempo a dieta, las cosas más nimias son las que marcan la diferencia entre el éxito y el fracaso, así que hay que estar alerta a todo lo que nos pueda desatar el hambre